En el corazón del Clausura 2025, el América enfrenta un reto monumental: las lesiones han dejado su huella en el equipo, pero la llama de la ilusión por el tetracampeonato aún arde con fuerza. Tras su eliminación en la Concachampions, la misión de alzar el cuarto título consecutivo se ha convertido en la máxima prioridad del conjunto azulcrema. A pesar de las adversidades, el director técnico André Jardine y la directiva del club no se han quedado de brazos cruzados; han comenzado a trazar un futuro más sólido, con la mirada fija en refuerzos claves para la próxima temporada.
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Uno de los nombres que surge con fuerza en la lista de deseos es el de Jeremy Márquez, el talentoso volante del Atlas. Según informaciones recientes, el América lo tiene en la mira como una de sus compras más esperadas para el Apertura 2025. Con la inactividad en el mediocampo causada por las lesiones de Alan Cervantes y Jonathan dos Santos, además de la salida de Richard Sánchez, el equipo ha tenido que hacer malabares para encontrar un equilibrio, lo que ha puesto de manifiesto la necesidad de un plantel más robusto.
La búsqueda de un nuevo mediocampista
La situación mediática alrededor de Márquez se intensifica, y su nombre ha resonado incluso en los oídos del estratega nacional, Javier Aguirre, quien ya lo ha convocado a la Selección Mexicana. Esta atención podría ser el empujón que el América necesita para formalizar una oferta; no es la primera vez que su nombre ha sido debatido en Coapa, pero este podría ser el momento ideal para su llegada.
Intercambio de talentos en el horizonte
El interés por el mediocampista se ha vuelto tan ferviente que el cuadro americanista no escatima en esfuerzos. Se habla de un posible intercambio en el que cederían a Igor Lichnovsky y Javairo Dilrosun al Atlas para hacerse con Márquez, quien se ha convertido en la joya anhelada del equipo. Como si fuera un juego de ajedrez, las piezas se mueven estratégicamente en busca de la victoria.
Además, es crucial mencionar que el Atlas aún no ha renovado el contrato con el futbolista, lo que abre una ventana de oportunidad para que ambos equipos negocien y hagan un trato que beneficie a todos. La curiosidad por un futuro en el América también ha sido sondeada entre el jugador, y parece que la idea no le desagrada en lo más mínimo.
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Aunque hasta el momento no hay una propuesta formal ni un acercamiento oficial entre las directivas, los murmullos continúan creciendo en el aire. La afición americanista sueña con la llegada de un nuevo mediocampista que pueda elevar el nivel del equipo hacia nuevas alturas. Sin duda, con Jeremy Márquez en el horizonte, el futuro del América podría brillar aún más intensamente.
