El técnico Fabián Bustos se despidió de Universitario tras aceptar oferta de Olimpia de Paraguay
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El fútbol es una montaña rusa de emociones, y hoy el club Universitario de Deportes siente la partida de uno de sus más grandes artífices: Fabián Bustos. Este estratega que llevó a los merengues al bicampeonato y dejó una huella imborrable en el ADN del club, ha decidido embarcarse en una nueva aventura en tierras guaraníes.
Un adiós lleno de emociones
En un giro inesperado de los acontecimientos, Bustos optó por dar un paso al costado luego de recibir una oferta tanto deportiva como económica de Olimpia de Paraguay. Su último duelo, una remontada épica con marcador de 4-1 frente a Melgar en el Torneo Apertura de la Liga 1 2025, fue como si los dioses del fútbol decidieran echarle un guiño final. El técnico se despidió entre aplausos y lágrimas en los ojos, tanto de los jugadores como de los fieles hinchas merengues.
Reflexiones y agradecimientos
En una conferencia junto al administrador del club, Jean Ferrari, Bustos no pudo contener su emoción. Era un mar de sentimientos encontrados, agradeciendo el cariño y reconociendo las críticas. «A pesar de los comentarios negativos, estoy profundamente agradecido», dijo con la voz entrecortada, dirigiéndose a L1 Max mientras dejaba entrever su emoción genuina.
La huella de un arquitecto del fútbol
Con la mirada fija en el horizonte futbolístico, Bustos expresó: «Es probable que haya dejado una marca aquí. Quizás no logré todo lo que deseaba en el plano internacional, pero sé que se hizo un gran trabajo». Universitario se convirtió en su familia, y así lo manifestó, recalcando las vivencias positivas que lo acompañarán siempre.
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Críticas y un ambiente divisivo
El argentino no se mordió la lengua al referirse a los detractores. A pesar del doble título que cosechó, existía un sector que nunca dejó de cuestionar. «Existe una falta de unión alrededor del club», comentó con cierta ironía. Como un equipo invicto, la ‘U’ debía ser celebrada y no objeto de críticas infundadas.
El fútbol y sus paradojas
Entre analogías futbolísticas, Bustos comparó la actitud de fanáticos y exjugadores en el centenario que dejó un eco de gloria. «El equipo va invicto, pero parece que algunos prefieren ver la crisis donde no la hay», concluyó, dejando claro que, aunque el césped cambia, las emociones dentro de la cancha y en las graderías siguen siendo las mismas.
La partida de Bustos no es un adiós, sino un ‘hasta luego’, y mientras los aficionados de Universitario cierran un capítulo, Olimpia abre sus brazos a un nuevo reto, con la promesa de seguir escribiendo historias llenas de gloria.
