Universidad de Chile cerró la temporada con un doblete de emociones. Con garra y corazón, los azules vencieron a Ñublense y se alzaron con la Copa Chile. Sin embargo, para muchos, este logro se siente como un “saca pica” luego de la pena que les dejó pasar de largo el Campeonato Nacional. Ver a Colo Colo bañarse en gloria con el Huemul de Plata es una imagen difícil de borrar.
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Una lucha más allá de la cancha
Los laicos están decididos a pelear por todo y persistirán en el TAS para buscar el título por la vía legal. Todo esto debido a la controversia de la infracción de Jorge Almirón, que fue desestimada por las salas del Tribunal de Disciplina. No obstante, el análisis no pasa sólo por estos trámites; dentro de la cancha también se libraron batallas memorables.
La voz de la experiencia: Marco Olea opina
Marco Olea, un verdadero hincha de la U desde la cuna, revisa este campeonato con una honestidad brutal. «Dejemos de llorar, nos farreamos el campeonato», dice, sacudiendo las conciencias. Con cifras en mano, recalca: «Diez puntos de ventaja y nos pasaron. Agradezcamos por el premio de consuelo». La Copa Chile, aunque valiosa, no es al parecer motivo de fiesta para el antiguo goleador azul.
Salvando lo positivo bajo la dirección de Álvarez
A pesar del trago amargo, Olea también reconoce los avances de este año. Resalta la mejora en el juego bajo el mando de Gustavo Álvarez durante 2024, enfatizando que hay mucho bueno que rescatar. Sin poner el dedo en la llaga, pero con firmeza, menciona que la U recobró cosas perdidas, dejando un claro mensaje de apoyo hacia el técnico argentino.
Mirando al futuro: Aprendizajes y desafíos
Olea remata con un mensaje claro: «Dejar de llorar, seguir mejorando, rescatar lo bueno y lo malo, y mejorarlo». Sus palabras resuenan como un grito de guerra de cara al futuro, instando a los azules a aprender del pasado.
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Mientras tanto, el plantel estudiantil se toma un merecido descanso. Volverán a la acción el 16 de diciembre para iniciar la pretemporada con la energía renovada. En el horizonte se asoma un duelo crucial: la Supercopa contra Colo Colo, que promete ser una verdadera revancha. Además, el gran sueño de la próxima temporada es rugir en la Copa Libertadores, donde el segundo puesto local les asegura un cupo y una jugosa recompensa de US$ 3 millones.
Sin duda, estos desafíos traerán nuevas emociones y, quién sabe, quizás la U vuelva a escalar peldaños con pasión y empeño.
