Fortaleza CEIF dio el batacazo este viernes y venció a Once Caldas por 0-2 en el estadio Palogrande por la fecha 16 de la Liga Betplay 2024-II. Los goles del juego fueron de Nicolás Rodríguez y Ronaldo Pájaro. ¿Quién habría imaginado un resultado así? Los Amix lograron imponerse en un duelo donde la determinación y la estrategia hicieron la diferencia.
Un asalto inesperado en el Palogrande
Desde el inicio del partido, la tensión era palpable. En la primera parte, Once Caldas mostró intención con su primera aproximación sobre el minuto 2. El jugador Juan David Cuesta centró para Alejandro García, pero su remate mordido se fue desviado, dejando claro que el arquerito Juan Diego Castillo estaba preparado para lo que viniera.
Sin embargo, los dueños de casa no se quedaban atrás. Apenas transcurrieron cuatro minutos desde el primer acercamiento, y Cuesta nuevamente lo intentó, esta vez metiéndose al área para sacar un derechazo que Castillo logró atajar enviando el balón hacia el tiro de esquina. Era evidente que la batalla estaba servida. A los 13 minutos, Fortaleza tuvo su primera oportunidad con Sebastián Navarro, quien disparó desde el borde del área, pero el balón se fue directo a las manos del arquero James Aguirre.
Goles que cambiaron la dinámica
Cuando el reloj marcó el 19’, Jefry Zapata se adentró en el área, y aunque tuvo la oportunidad de marcar, el balón se perdió sobre el travesaño. Sin embargo, sería Fortaleza quien daría la nota más alta a la media hora de juego. Con un juego colectivo exquisito, el balón comenzó en los pies de Castillo, pasó por Ivan Anderson y terminó en la red gracias a Nicolás Rodríguez, quien no perdonó al arquero Aguirre. Un gol que dejó a todos boquiabiertos, y que era solo el comienzo de la sorpresa.
La respuesta de Once Caldas no se hizo esperar. Diez minutos después, el equipo local tuvo su chance más clara de la primera mitad. Cuesta recibió un centro de Dayro Moreno dentro del área y, aunque su remate fue fuerte, la defensa de Fortaleza tuvo reflejos y logró sacar el balón de la línea. Aun así, quedó claro que el Blanco Blanco estaba luchando, aunque el resultado aún les era esquivo.
El segundo tiempo fue un reflejo del primer
Ya en la segunda mitad, Fortaleza empezó a buscar aumentar su ventaja. Nicolás Rodríguez fue el encargado de inquietar de nuevo a la defensa de Caldas con un remate que Aguirre contuvo sin problemas. A pesar de mantener el control del balón, Once Caldas no logró acercarse a la portería rival, siendo su primer intento de peligro hasta el minuto 70. Esa vez, Roger Torres lanzó un centro hacia Lucas Ríos, quien remató de cabeza, pero el balón apenas pasó por un costado del arco. ¿Sería este el momento que cambiaría la historia del partido? La respuesta fue negativa.
El cierre del espectáculo
Cuando el cronómetro se acercaba al final del encuentro, exactamente en el minuto 86, Fortaleza decretó el cierre del juego. En una jugada que inició con Hayen Palacios centrando desde la frontal del área, un mal despeje de la defensa no hizo más que beneficiar a Ronaldo Pájaro, quien, con gran precisión, sacó un derechazo que se coló en la esquina del arco de Aguirre. ¿Acaso había manera de volver a levantarse tras un golpe así?
Un resultado que reconfigura la tabla
Este triunfo significativo permite a Fortaleza CEIF alcanzar la cifra de 24 unidades, colocándose octavos en la tabla de la Liga Betplay. Mientras tanto, Once Caldas se queda con 30 puntos, ocupando la segunda posición. La lucha por los puestos de clasificación está que arde y cada partido cuenta.
En el horizonte, los Amix tendrán un enfrentamiento importante contra La Equidad en la próxima fecha, mientras que el Blanco Blanco se enfrentarán a Santa Fe. Sin duda, los hinchas esperan ansiosos por ver cómo se desarrollará esta historia emocionalmente intensa en el cierre de la fase regular.
Así es el fútbol, un deporte donde los resultados pueden cambiar con un solo toque de balón. En esta ocasión, fue Fortaleza quien tuvo la última palabra, dejando a todos los aficionados con ganas de más acción en una liga que promete emociones hasta el final.
