La caza para encontrar al nuevo timonel de las Chivas de Guadalajara sigue siendo un torbellino de rumores y expectativas. Entre las apuestas sobre quién ocupará el banquillo del Rebaño Sagrado, ha surgido un nombre que muchos creían que encajaría como un guante con la filosofía y pasión del conjunto rojiblanco: Nicolás Larcamón.
¿Una oportunidad perdida para las Chivas?
Sin embargo, esta historia, que parecía escrita en las estrellas, se desmoronó antes de empezar. De acuerdo con diversas fuentes, Nicolás Larcamón, con todas las de la ley, presentó un plan a la directiva del club tapatío. A pesar de su entusiasmo, algo no hizo clic con los dirigentes de Chivas, quienes decidieron no confiarle la batuta del equipo a este talentoso estratega argentino.
«Larcamón está descartado. Entregó un proyecto, pero no va. No va, no les gustó. También hubo un tema de representantes que no les convenció», se escuchó en la rumorosa escena futbolera.
El escollo del representante
Las razones detrás de este sorprendente desenlace parecerían residir en el ámbito de los representantes. Se murmura que el representante de Larcamón buscaba una comisión y cierta influencia en las decisiones del cuerpo técnico, algo que no gustó en la Perla Tapatía.
Nuevas caras en el horizonte rojiblanco
Con el proyecto de Larcamón lanzado a la deriva, el panorama se aclara como esas tardes soleadas en Guadalajara, y ahora figuran en el radar dos candidatos prominentes: Robert Dante Siboldi y Espinoza. Estos nombres han tomado delantera en la carrera por hacerse con la dirección técnica tras la intempestiva salida de Fernando Gago.
«Espinoza y Siboldi, los más adelantados. Hay otros dos candidatos extranjeros, que junto con los otros, son las opciones A, B, C y D sobre la mesa de Amaury Vergara», se asegura en los pasillos del fútbol.
El enigma tras la partida de Gago
La salida de Gago fue tan abrupta como un trueno en un día despejado. Luego de despedirse del club, Gago confesó al periodista argentino Julio Pavoni la poderosa razón detrás de su decisión. El sueño de dirigir al Boca Juniors, ese deseo que lo había acompañado como una sombra desde que colgó los botines.
«Desde que me retiré soñaba con este momento de dirigir al Boca Juniors. Es un sueño», admitió Gago, cerrando un capítulo en Verde Valle y abriendo otro en la mítica Bombonera.
Aficionados en pie de guerra
Esta partida dejó a los fanáticos del Rebaño con un amargo sabor de boca, y la reacción no se hizo esperar. La forma en que dejó el equipo fue como un balde de agua fría para los seguidores, y ahora, Gago es considerado persona non grata en Verde Valle, tras aparentar haber preparado su salida con Riquelme a espaldas del club. La pasión en las gradas sigue encendida, buscando respuestas y ansiando que el equipo llene el vacío con un líder que encauce las esperanzas del chiverío.
