El interés de Boca Juniors por reforzar su plantilla ha puesto su mirada en el fútbol mexicano. En un movimiento que sacude las aguas del balompié local, los Xeneizes han puesto su mira en una figura clave de Cruz Azul, Gonzalo Piovi. Con el mercado de invierno a la vuelta de la esquina, este fichaje podría ser la jugada maestra que el técnico Fernando Gago quiere hacer desde Argentina.
El Deseo de Gago
Fernando Gago, quien conoce a Piovi desde su etapa en Racing de Avellaneda, tiene claro que el zaguero central podría ser la pieza que falta en su rompecabezas táctico en Boca. En Racing, Piovi fue más que un simple defensa; fue un guerrero en la cancha y un valuarte en la línea de fondo, disputando 75 partidos bajo la dirección de Gago.
El Piquete al Avispero
La noticia del interés de Boca no ha caído en saco roto. En la Liga MX, el rumor ha corrido como pólvora en un día ventoso. Piovi, quien tiene contrato con Cruz Azul hasta diciembre de 2026, emerge como una figura firme para Martín Anselmi y su equipo. Este contrato, más valioso que el oro, podría complicar el desembarco del jugador en Argentina.
Entre el Azul y el Oro
Además de cazar talentos en el fútbol mexicano, Boca también ha tenido la vista en Bruno Amione de Santos Laguna. Pero Piovi no es cualquier fichaje; es considerado un pilar en el esquema cementero, incluso si sus números en México son modestos comparados con su rendimiento en Argentina.
Un Desafío Monumental
Con un contrato que amarra a Piovi al Azul y un valor tasado en 3.3 millones de dólares, Boca enfrentará una verdadera carrera cuesta arriba. Cruz Azul no planea soltar a su defensa así como así, creando un choque de titanes en el ámbito de las transferencias. Esta negociación será, sin duda, un electrizante episodio para los fanáticos que siguen cada latido del mercado de fichajes.
La Máquina Celeste, como una muralla azul, defenderá a su jugador, mientras Boca Juniors prepara la seducción definitiva. Así se vive la intensidad del fútbol, donde cada partido se juega también en las oficinas, y cada firma podría ser el gol de la victoria. Es, sin duda, la pasión en estado puro.