El portero sevillano de la UD Las Palmas, Álvaro Valles, quien ha sido recientemente galardonado en la XXXVII Gala de Deportes de La Rinconada, no oculta su deseo de, algún día, vestir los colores del Betis. Tras recibir el homenaje en su pueblo natal, Valles expresó con nostalgia y determinación: “Me hacen saber que quieren contar conmigo. Es mi casa, ojalá algún día pudiera jugar en el club de mi tierra”.
Un Futuro Verde y Blanco
En las profundidades de la noche sevillana, mientras las palmas resonaban en el Centro Cultural de La Villa, Valles compartió sus esperanzas y sueños con un toque de melancolía. Imagina al portero como un navegante, todavía esperando llegar a la orilla del Betis, que lo intentó fichar el verano pasado. «A todo futbolista le gusta triunfar en su tierra,» confesó, dejando en el aire el aroma de un futuro que podría escribirse con letras verdiblancas.
Una Temporada de Desafíos
A sus 27 años, Valles enfrenta una temporada atípica en Las Palmas. Sin haber jugado un solo minuto y con su contrato expirando el próximo 30 de junio, su situación evoca una sensación de tiempo suspendido, como un reloj que ha dejado de moverse. El presidente del club, Miguel Ángel Ramírez, había anunciado previamente que el guardameta rechazó ofertas de renovación y algunas propuestas de traspaso, negándose quizás a abandonar el barco antes de llegar a puerto seguro.
Orgullo Rinconero
El reconocimiento a Valles no se detiene en sus deseos. Mientras las luces brillaban sobre él, el alcalde de La Rinconada, Javier Fernández, se deshizo en elogios, definiéndole como «un espejo de sacrificio». Para su comunidad, simboliza aquel baluarte que se erige firme contra las adversidades, «una de las banderas del deporte» local que ondea con orgullo inquebrantable.
- Destino incierto: A pesar de su situación contractual, el deseo ardiente de Valles por defender la portería del Betis continúa siendo un sueño que puede convertirse en realidad en cualquier ventana de transferencias.
- El reflejo del sacrificio: Se convierte en un ejemplo palpante del esfuerzo y la dedicación que sus paisanos admiran.
Conclusiones
En el teatro del fútbol, donde cada jugador es una estrella esperando su momento en el foco, Álvaro Valles se mantiene en el centro del escenario, deseoso de escribir el próximo acto de su carrera con un guion de esperanza e ilusión. Mientras la pelota siga rodando, el sueño bético permanecerá vivo.
