En el corazón del verano futbolístico, bajo el cálido cielo de Las Caldas en Oviedo, los árbitros de Primera División se embarcaron en su propia pretemporada del 28 de julio al 1 de agosto. Este cónclave anual reúne a los guardianes del juego: 20 árbitros de campo, 40 asistentes y los cinco dedicados exclusivamente al VAR, esas figuras como ángeles guardianes electrónicos del fuera de juego.
Rostros conocidos y una generosa bienvenida
Los anfitriones asturianos, Pablo González Fuertes y Judit Romano García, recibieron al grupo con los brazos abiertos, augurando una temporada vibrante, rica en emociones y retos. Mientras los colegiados disfrutaban de una jornada de camaradería, el balón y las nuevas tecnologías como el SAOT, no eran las únicas estrellas del día.
Un desencuentro que desata la tormenta
El verdadero drama se desató posteriormente, casi como si de un “clásico” se tratara, entre bambalinas, donde el presidente del CTA, Luis Medina Cantalejo, mantuvo un intercambio palabras acaloradas con Jorge Figueroa Vázquez, que parece tan intenso como un derbi sevillano. Figueroa Vázquez, recientemente reubicado en el grupo de VAR tras no alcanzar la «edad de retiro,» parece no haber digerido bien esta decisión. La discusión llegó a un punto crítico, requería de un “árbitro pacificador,” el propio José María Sánchez Martínez, para poner fin a este desacuerdo casi convertido en tangana.
El silencio antes del pitido final
Una mezcla de desilusión y nostalgia envolvió a Figueroa Vázquez tras más de tres décadas en el terreno de juego, al no recibir la oportunidad de despedirse en el césped, acompañado por sus seres queridos, una tradición tan arraigada como el mismo fútbol. Un lamento que resonaba en las gradas vacías de su decepción.
Relaciones entrelazadas fuera del campo
A lo largo de los años, Medina Cantalejo y Figueroa Vázquez no solo cruzaron caminos en el ámbito profesional, sino que sus lazos personales también se trenzaron en otro terreno. María Medina, hija del presidente, compartió un capítulo profesional junto a Vázquez en CESUR, antes de unirse al ámbito federativo, caminando hacia la UEFA.
Fúnebre desenlace y respuesta oficial
Como en un último tiro libre de la noche de la pretemporada, el desencuentro dejó su estela. A pesar de las disputas narradas, desde el CTA se emitió una nota vehemente, desmintiendo lo ocurrido y amenazando con la justicia para aquellos que osen tergiversar la historia.
Esperando el pitido final
En un último intento por despejar el área de dudas, los involucrados ejercieron su derecho a réplica, asegurando que en ese campo de Oviedo no hubo lugar para la confrontación física. Una historia más que sumar a la crónica de un verano que, para los colegiados, tuvo más de suspense que de descanso.